El agua no sólo es parte esencial de nuestra propia naturaleza física y la de los demás seres vivos, sino que también contribuye al bienestar general en todas las actividades humanas. El agua se utiliza mayormente como elemento indispensable en la dieta de todo ser vivo y ésta es uno de los pocos elementos sin los cuales no podría mantenerse la vida. Por todo esto el agua ofrece grandes beneficios al hombre, pero a la vez puede transmitir enfermedades, como el cólera. El agua que procede de fuentes superficiales (ríos, lagos y quebradas), es objeto día a día de una severa contaminación, producto de las actividades del hombre; éste agrega al agua sustancias ajenas a su composición, modificando la calidad de ésta. Se dice que está contaminada pues no puede utilizarse como generalmente se hace.
Esta contaminación ha adquirido importancia debido al aumento de la población y al incremento de los agentes contaminantes que el propio hombre ha creado.
Las fuentes de contaminación son resultados indirectos de las actividades domésticas, industriales o agrícolas. Ríos, canales y lagos son contaminados por los desechos del alcantarillado, desechos industriales, detergentes, abonos y pesticidas que escurren de las tierras agrícolas. El efecto en los ríos y lagos se traduce en la desaparición de la vegetación natural, disminuyen la cantidad de oxígeno produciendo la muerte de los peces y demás animales acuáticos.
El petróleo vertido en el mar daña gran parte de la fauna y flora.
Contaminantes del agua
1.- Microorganismos patógenos causantes de: fiebre tifoídea, paratifus, hepatitis, disenterías, etc.
2.- Detergentes sintéticos y fertilizantes ricos en fosfatos.
3.- Pesticidas orgánicos como el DDT, aldrín, dieldrín, etc.
4.- Productos químicos inorgánicos como los nitratos, nitritos, fluoruros. arsénico, selenio, mercurio.
5.- Petróleo y sus derivados como el alquitrán, aceites, combustibles.
Contaminada, el agua se convierte en un vehículo de agentes infecciosos como hongos, virus, bacterias, protozoarios y helmintos, además de sustancias tóxicas como pesticidas, metales pesados y otros compuestos químicos, orgánicos, que son perjudiciales para la salud.
El agua también se utiliza para irrigar cultivos y para dar a beber a los animales, los cuales a su vez se van a convertir en alimento para los humanos y otros seres vivos, haciendo una cadena alimentaria, de tal manera que si las fuentes utilizadas están contaminadas, también se contaminarán nuestros cultivos, los animales, los humanos, y los peces que forman parte del medio acuático.
El agua es vida
- El 70 por ciento de nuestro cuerpo está formado por agua.
- El agua es un elemento vital para la vida, la salud y nos sirve para la limpieza de nuestro cuerpo.
- El agua sirve para lavar nuestra ropa y utensilios.
Por: Antonio Rodríguez González
Menos inspecciones e igual número de barcos retenidos por deficiencias que les impedían navegar con seguridad. Es el resumen de las estadísticas del Memorandum de París (MOU) correspondientes a 2011 en El Musel.
El MOU trata de evitar que barcos subestándar entren en los puertos de los países que los han suscrito, que son la mayoría de los europeos más los Estados Unidos de América y Canadá.
Inspectores de la Administración de cada país, en el caso español las Capitanías Marítimas, acceden periódicamente a barcos de pabellón extranjero para comprobar que a bordo todo está bien en lo referido a elementos de seguridad y de prevención de la contaminación marítima.
En 2011, los inspectores de El Musel examinaron un total de 59 barcos, que se saldaron con tres detenciones hasta que las irregularidades detectadas quedaron subsanadas. Un año antes, los barcos visitados fueron 78, con el mismo resultado en cuanto a detenidos, y en 2009 se produjeron 75 inspecciones con cinco buques que no superaron los requisitos mínimos para poder navegar.
Hay que señalar, tanto en lo que se refiere a 2011 como a 2010, que estuvo detenido un cuarto barco, el 'Civra', si bien su retención se contabiliza en las estadísticas de 2009, que es cuando entró en Gijón.
Fuentes consultadas por este periódico indicaron que el descenso en el número de inspecciones se debe básicamente a que una mayor participación de otros países en el MOU (España fue y sigue siendo país destacado por el control efectuado) hace innecesario comprobar el estado de barcos que vienen ya con una analítica próxima en el tiempo. No se trata de controlar los mercantes cada vez que entran en un puerto y, salvo que se haya detectado alguna anomalía no tan relevante como para provocar una detención, suelen pasar seis meses entre un examen y el siguiente.
Menos tráfico
Por otra parte, fuentes consultadas por EL COMERCIO indicaron que el descenso del tráfico marítimo de El Musel propicia también que haya menos inspecciones.
En puridad, aunque el tráfico ha descendido en 2011 respecto a 2010 (aproximadamente en medio millón de toneladas), el número de barcos entrados en El Musel aumentó. La razón es que sólo la Autopista del Mar ha propiciado ya cerca de 150 entradas a lo largo de 2011, línea regular que durante 2010 sólo funcionó durante cuatro meses.
Los tres barcos que el pasado año resultaron detenidos conforme al MOU en El Musel fueron el 'Melish', de pabellón maltés, al que el 12 de abril le fueron detectadas 13 anomalías, siete de las cuales provocaron cuatro días de detención.
La inmovilización más larga duró ocho días y la sufrió el 'Giannis M'a partir del cinco de septiembre, también de pabellón maltés, por ocho faltas graves.
Por último, el 14 de noviembre del pasado año quedó retenido durante cinco días el 'Oporto', de pabellón portugués.
Por Irene Martín Patón.